miércoles, 18 de abril de 2007

¿Alguna vez os ha explotado una tele?

A mi sí.
Justo cuando me estaba echando una siestecilla después de dormir 10 horas en dos días, de repente me despierto alertado por una explosión. Conseguí ver el último microsegundo emitido por esa pobre televisión antes de que se apagara y empezase a echar humo blanco sin parar y junto al humo un olor a condensador quemado horrible, tan horrible que todavía me huele la ropa a eso.
El caso es que estas Navidades me ocurrió algo parecido con la tele de mi habitación, se le quemó un condensador pero no llego a explotar y al final sobrevivió.
Tengo gafe con las teles, ¡qué peligro!

No hay comentarios: